lunes, agosto 18, 2008

Yo hice cola con Salma Hayek para entrar al servicio

Sí, habéis leído bien el título de la entrada; una vez hice cola con Salma Hayek para entrar al servicio. Ya sé que al contar esta historia abro la puerta a que dudéis sobre si lo escrito con anterioridad en este blog es o no verídico, pero lo prometo, fue así. Y ahora cuento qué es lo que me ha animado a dar este paso adelante, sacar pecho y decir en voz alta: ¡YO HE HABLADO CON ELLA!

Pues bien, esta salida de tono se debe a la indignación. Sí, la INDIGNACIÓN, así, con mayúsculas. Me meto ePublicar entradan la página de Afterellen.com y me indigno porque las internautas de Estados Unidos sitúan a mi amada Bette -bueno, en realidad a la actriz que la interpreta, Jennifer Beals- como la séptima mujer más sexy del mundo mundial. Salma Hayek está sólo dos puestos por atrás, la novena, y por más vueltas que le doy, no lo entiendo. Si el destino las quiere tan próximas, ¿por qué la que estuvo haciendo cola conmigo y charlando un rato esa noche de 2002 en Los Ángeles no fue Bette?

Para las que penséis que es del todo imposible coincidir en la cola para entrar al servicio con Salma Hayek os lo explico con detenimiento: donde estuvimos haciendo cola juntas fue en la casa de Los Ángeles de Antonio Banderas... Vale, he releído lo que acabo de escribir y supongo que así lo empeoro todo. Si puede resultar increíble lo de Salma Hayek supongo que más aún es decir que has estado en la casa de Antonio Banderas. Y más increíble aún resultaría si dijera toda la verdad: que fue por motivos de trabajo.

De acuerdo, empiezo por el principio. Banderas cedió graciosamente su casa para que se hiciera una fiesta para contar por allí qué es Andalucía. Invitó a sus amiguetes de Hollywood y unos cuantos pringados fuimos para trabajar. Sí, trabajar, aunque he de decir que ir a una fiesta de éstas es un trabajo mucho más agradable que muchos otros que me han tocado hacer.

Así que allí estábamos unos cuantos pueblerinos siendo recibidos por esa gran señora llamada Tippi Hendrix, madre de la anfitriona, y aún guapísima; compartiendo lonchas de jamón serrano con un Sylvester Stallone acartonado y con un color de piel cerúleo que daba susto, o mirando de reojo a un tío que llevaba una gorra 'comía de mierda' (como decimos por aquí), debajo de la que sobresalía un peno canoso que pedía a gritos un buen lavado, con unos vaqueros 'roíos' y que resultó ser Benicio del Toro, el mismo que sale impoluto en las portadas de las revistas y que tiene ya algún Oscar, pero que si yo me hubiera encontrado esa noche en un callejón desierto hubiera pensado que venía a robarme. Serán prejuicios, vale, pero algunos llegamos a pensar que era el aparcacoches que iba a ganarse unos dólares estacionando limusinas. Es cierto que en la invitación ponía que la vestimenta tenía que ser "casual but elegant", pero él era todo casual.

Yo preferí curarme en salud y como siempre me he sentido torpe para eso de acertar con la vestimenta adecuada me compré un vestido negro, de lino y con volantitos por abajo. Y para acompañarlo me puse un mantón, también, negro, con flecos y muy, muy andaluz. De modo que así ataviada me encontraba yo esperando para entrar al servicio cuando apareció Salma Hayek, con otro vestido negro, unos taconazos que ya querría para ella Letizia, pero que no evitaban que yo, con mi metro sesenta, la pudiera mirar por encima del hombro, y con muchas tetas. Al menos, a mí me pareció que tenía muchas tetas.

Y la tía, 'mu salá', se puso a pegar la hebra con las dos o tres españolas que, como es preceptivo, hacíamos cola juntas: "Qué mantones más bonitos que llevan. Porque no lo he pensado antes, que si no me hubiera traído el mío" "Ay, pero si vas guapísima, Salma". "Sí, pero esos mantones son divinos y la fiesta es divina. Pero qué buena que estaba la comida. Yo he comido muchísimo y, no puede ser, porque voy a engordar". "Ay, pero si estás canijísima y estupenda". "Sí, pero es que me encanta el jamón loncheado. La última vez que fui a España me traje en la maleta, así escondidito y envasado al vacío porque aquí no dejan que lo entremos". "Ay, chiquilla, la próxima vez que vengas lo dices y te regalamos tó Jabugo".

Así fue, lo prometo, y también puedo afirmar que Salma Hayek es simpática, al menos así al pronto, aunque no es el tipo de mujer que a mí me parece sexy. Se ve que mi gusto es diferente al del francés ricachón que estuvo con ella. La que sí estaba espléndida era Marisa Tomei, guapísima vestida con unos vaqueros y una simple camisa blanca. Ahí empezó mi idilio con ella. Por cierto, al escribir este post me está viniendo una idea que no puedo apartar de mi cabeza: ¿Y si Jennifer Beals también estuvo en esa fiesta pero pasó desapercibida ante mis ojos porque aún no conocía a Bette?

*Para quienes dudéis de la veracidad de esta entrada, os dejo un enlace (pinchando aquí) que prueba que todo sucedió y no es producto de mi imaginación.







19 comentarios:

Arrítmica dijo...

Yo coincidi en una fiesta con pozí.... JE! eso cuenta????
Que arte niña! anda que no lo pasarias bien esa noche (aunque fuera currando) joe me cambio por ti, ajajjaa
Besos guapa!

Anónimo dijo...

Vale, esa historia es verídica, por que yo la conocía desde hace algún tiempo y mantener una mentira tantos años es muy complicado, ejejejeje. Hasta ahí bien, pero no paso por dejar que en el post tan cuidado y estupendo le cambies el apellido a la sin par Nathalie "Tippi" Hedren (lo de Hendrix suena mejor, pero no es la madre de Jimmy). Un beso guapa!!!!!!!!!!

Leonor Cabrera dijo...

Sonsolitas, gracias por dar veracidad a esta historia y por pasearte por este blog catárquico. En cuanto al nombre de Tippi Hedren, pues llevas razón: lo miré en IMDB para escribirlo en el post, pero una vez más me tracionó mi subsconciente y lo mezclé con el nombre de la ginebra Hendricks (creo), y no sé cómo deribó en ese Hendrix. ¿En qué estaría pensando yo?...

Mármara dijo...

Tienes toda la razón, ¿por qué no quiso, el Universo, que hicieras cola con la mi (nuestra) Bette, en vez de con Salma? No tengo respuesta, aunque creo poder adivinar que si hubiera sido así, igual no te hubieras podido recuperar y andarías por los anillos de Saturno, en vez de andar por la tierra y contarnos estas cosas.
Sepas que me acordé de ti en Ámsterdam, cuando, al entrar en un sex-shop del Barrio Rojo, me encontré, de frente, con la famosa mariposa y el patito sadomaso. No lo pude de evitar, ni acordarme de ti, ni reírme a carcajadas.

Leonor Cabrera dijo...

Me alegro que te rieras un rato en Amsterdam a mi costa, Mármara... ¿A que mola el patito?

Por cierto, las vacaciones están haciendo estragos en mi ortografía: al Hendrix erróneo se ha unido un derivado con 'b' escrito en el comentario anterior... Creo que se me está relajando demasiado el cerebro con tanto cervecita y tanto baño. Espero que no sea algo irreversible, porque si esto no se cura las voy a pasar putas cuando vuelva al curro a finales de septiembre.

Mármara dijo...

Sí que molan, sí, todos los patitos de la colección. Anduve un poco torpe y no me compré ninguno. ¡Cachis!
Pero, ¡ojo!, no me reí a tu costa, sino gracias a ti, que es diferente, beibi.

Leonor Cabrera dijo...

Pues sí que me mola que te rieras gracias a mí... Todo un halago, Mármara.

Suassi dijo...

Bueno no voy a decir si me la creo o no. El mundo es un pañuelo y suelen pasar cosas de estas más amenudo de lo que la gente se cree.
La conclusión que saco, es que hasta las actrices, famosas, etc. etc. también tienen que hacer cola para ir al baño. Así que a partir de ahora hay que mirar quién hace cola en la puerta de los aseos. Aunque ayuda a tener muchas posibilidades de que te toque al lado una famosa, actriz, o lo que sea, si estás en casa de Antonio Banderas. Porque si hubieras estado en mi casa, seguro que ni a Salma, ni a tu Bette, ni a ninguna de ellas.
Por fortuna mi profesión te hace ver que la gente es normal, por mucho dinero que tengan en el banco o en su caja fuerte. Y al igual que todos, tienen sus defectos y sus virtudes. Alucinarías si supieras cómo son de verdad las estrellas. Quienes son pura fachada y quienes se muestran tal y como sol. La verdad es sorprendente.
Con la última estrella que he hablado ha sido con Pau Gasol, un gran tipo (y no lo digo por el tamaño, jajaja) muy majo.

Besets

Suassi dijo...

Bueno no voy a decir si me la creo o no. El mundo es un pañuelo y suelen pasar cosas de estas más amenudo de lo que la gente se cree.
La conclusión que saco, es que hasta las actrices, famosas, etc. etc. también tienen que hacer cola para ir al baño. Así que a partir de ahora hay que mirar quién hace cola en la puerta de los aseos. Aunque ayuda a tener muchas posibilidades de que te toque al lado una famosa, actriz, o lo que sea, si estás en casa de Antonio Banderas. Porque si hubieras estado en mi casa, seguro que ni a Salma, ni a tu Bette, ni a ninguna de ellas.
Por fortuna mi profesión te hace ver que la gente es normal, por mucho dinero que tengan en el banco o en su caja fuerte. Y al igual que todos, tienen sus defectos y sus virtudes. Alucinarías si supieras cómo son de verdad las estrellas. Quienes son pura fachada y quienes se muestran tal y como sol. La verdad es sorprendente.
Con la última estrella que he hablado ha sido con Pau Gasol, un gran tipo (y no lo digo por el tamaño, jajaja) muy majo.

Besets

Suassi dijo...

Perdón, no sé que he hecho pero ha salido dos veces publicado mi comentario.

Anónimo dijo...

Pues a ver sai cuando me engancho a leerte vas y dejas de actualizar, ¡no es justo!

Hoy estoy muy triste porque ha muerto Foster Wallace. Estoy de luto literario. Un beso!

Leonor Cabrera dijo...

Es que las vacaciones (además de las borracheras) me tienen el cerebro en punto muerto. El viernes vuelvo al trabajo y prometo volver a la carga con el blog. Lo de Foster Wallace ya lo sabía. Lo hemos leído esta mañana en la playa y nos hemos acordado de ti. Nuestro más sentido pésame.

Leonor Cabrera dijo...

Es que las vacaciones (además de las borracheras) me tienen el cerebro en punto muerto. El viernes vuelvo al trabajo y prometo volver a la carga con el blog. Lo de Foster Wallace ya lo sabía. Lo hemos leído esta mañana en la playa y nos hemos acordado de ti. Nuestro más sentido pésame.

Leonor Cabrera dijo...

Es que las vacaciones (además de las borracheras) me tienen el cerebro en punto muerto. El viernes vuelvo al trabajo y prometo volver a la carga con el blog. Lo de Foster Wallace ya lo sabía. Lo hemos leído esta mañana en la playa y nos hemos acordado de ti. Nuestro más sentido pésame.

Leonor Cabrera dijo...

Es que las vacaciones (además de las borracheras) me tienen el cerebro en punto muerto. El viernes vuelvo al trabajo y prometo volver a la carga con el blog. Lo de Foster Wallace ya lo sabía. Lo hemos leído esta mañana en la playa y nos hemos acordado de ti. Nuestro más sentido pésame.

Leonor Cabrera dijo...

Qué máquina. He publicado "sólo" cuatro veces el comentario... Menos mal que es mi blog, porque si fuera el de otro se pensaría que lo estoy boicoteando.

Concha Olid & Sonsoles López dijo...

JOP, vida intensa la tuya.

Mármara dijo...

Ya te estaba echando de menos, oyes, aunque, la verdad es que me encanta abrir tu página y encontrarme con la sonrisilla de la mi (nuestra) Bette.

Leonor Cabrera dijo...

Me alegro que te guste, Mármara. Y, Conso, en cuanto a lo de la vida intensa, pues no es tan intensa como pueda parecer. Últimamente es algo más rutinaria. ¡La estabilidad!